Más de tres millones de niños han nacido en Yemen en medio de los horrores de la guerra, iniciada en 2015.
Esos pequeños inocentes no despiertan entre dulces canciones de cuna, sino entre el aterrador estruendo de las bombas. Muchas veces no llegan a conocer el amor de sus padres, pero sí la violencia de los ataques del enemigo.
Otra consecuencia directa de la guerra es que 25.000 niños mueren durante el parto o en el primer mes de vida anualmente.
Una incontrolable epidemia de cólera y diarrea acuosa no dan tregua en varias regiones del país. Un millón de personas han sido afectadas y de ellas una cuarta parte son niños menores de 5 años. A esto se le suma que menos de la mitad de las instalaciones de atención médica no funcionan porque han sido destruidas durante los ataques.
http://diariouno.pe/2018/01/23/sigue-lloviendo-bombas-en-yemen/
FUENTE; diariouno/23-01-2018)